El Registro de la Propiedad, dependiente del Ministerio de Justicia, "tiene por objeto la inscripción o anotación de los actos, contratos y resoluciones judiciales o administrativas que afecten a la propiedad y a otros derechos sobre bienes inmuebles".

Por tanto, aunque como hemos afirmado más arriba, el registro de una vivienda no es obligatorio, sí que es una garantía de protección a favor del titular de la propiedad adquirida. Lo más normal es que, una vez firmada la escritura de compraventa y pagados los impuestos, se inscriba en el Registro de la Propiedad con el fin de salvaguardar el derecho de la propiedad adquirida. Cabe destacar, sin embargo, que a pesar de no ser un trámite a priori obligatorio, sí es necesario en el caso de solicitar una hipoteca. En efecto, esta inscripción tiene carácter constitutivo de la garantía entregada a favor de la entidad financiera o particular en favor de quien se otorga debido a su efecto "erga omnes".

Por lo tanto, tal y como se expone en la guía Cómo comprar una vivienda en España editada por los Registradores de España (consultar documento al final del artículo), la inscripción en el Registro de la Propiedad garantiza:

1. Ser considerado como único y verdadero propietario mientras no se declare lo contrario en sentencia judicial
2. Estar protegido frente a los acreedores del vendedor. Si el vendedor tiene o contrae deudas que no paga, los acreedores embargarán sus bienes, entre ellos los que consten en el registro de la propiedad, aunque su titular dominical sea otro, por lo que, el comprador que no haya inscrito su derecho o escritura, se verá inmerso en un proceso indeseado y costoso
3. Adquirir el derecho a ser protegido judicialmente en caso de que, por otros, sea discutido su derecho de propiedad o se perturbe su posesión o derecho de ocupación
4. Inscrito el derecho de propiedad, sin el consentimiento del propietario, nadie podrá adquirir con eficacia ningún derecho sobre el mismo

Destacamos también el hecho de que el registro de la propiedad es público, lo que permite, por ejemplo, a una persona con el deseo de adquirir una vivienda consultar si esa vivienda consta registrada a nombre de quien se lo vaya a vender o si existe algún derecho que lo grave (hipoteca, deudas, arrendamientos...) o alguna carga (embargo).

En definitiva, la inscripción en el registro de la propiedad, notificada mediante nota simple informativa o certificación expedida por el registrador, otorga más garantías legales sobre el bien del inmueble.

Guía Cómo comprar una vivienda en España